Dos hermanas, una era bella y vanidosa, se creía la más hermosa diosa
La otra hermana, humilde y amorosa, no era tan bella físicamente pero era una universal rosa
Vanidades relucía su hermana, un Ser oscuro solo emana
Dina la chica de buen corazón, ayudaba con amor y razón.
Bárbara, jugaba con los hombres, los engañaba y a veces se colocaba varios nombres
Dina, era pura en palabra y amaba lo creado, su espíritu por los Seres de Luz era deseado
Llego un guapo hombre a la aldea, llevaba un hermoso traje y de oro su correa
Las mujeres salieron a asediarlo, él les dijo, un amor vengo a encontrarlo.
La mujer que pase esta prueba se casará conmigo, seré su amor y su más dulce amigo
Tengo muchas riquezas en un hermoso palacio, mi nombre es príncipe Horacio.
Las chicas esperaban ansiosas su salvavidas, Bárbara les repartió jugo con somnífero y quedaron todas dormidas
El príncipe dijo, solo están las dos hermanas, ya que se durmieron las otras damas.
Bárbara dijo, yo soy la mejor, tengo belleza, y para mi amarte es un honor
Mi hermana Dina es fea, también es un poco atea
Dina dijo, mi hermana tiene razón, cásate con ella yo soy solo ilusión
No me interesan los príncipes ni las riquezas, vivo feliz unida al Cosmos en belleza.
Bárbara dijo, mentalmente ¡gane!, ya a mi hermana descarté
El príncipe dijo, me casaré contigo, Dina, eres la luz divina
Dina dijo, mi amor no se vende, ni siquiera a un duende
Gracias, príncipe, yo me retiro, con respeto por usted no suspiro.
Bárbara dijo, acéptame a mí, que no soy nerviosa, el príncipe le dijo, para mí no eres dispendiosa.
El príncipe se fue pero le quedo una lección, el amor va más allá de las riquezas y la pasión
Bárbara aprendió a Ser humilde y sincera, inicio su despertar en la nueva era
Dina, vive conectada con el amor de pluriuniversos, aquí termina esta historia en versos.
Gracias Dios, te alabo con potente voz.
Bendiciones,
Yider Elder Araque Cerón
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